Carla Moiso

Venecia, su ciudad natal de la que captura la esencia poética con valor romántico. Su arte se nutre de la riqueza de los reflejos de la laguna expresados ​​en un juego evocador de luces y vibraciones cromáticas, pero también como símbolo y metáfora de la vida, de la precariedad de la existencia humana.

Una Venecia que aparece como líquida y frágil, inestable y fugaz manifestación de cómo la realidad está constantemente en silencio y nunca parece lo que parece. Las representaciones de las «naturalezas vivas» con un sabor flamenco se ven como si tuvieran un alma, están invadidas por un sentimiento en busca de una luminosidad interna, una armonía de colores y una elegancia de las formas en la profunda conciencia de nosotros y la realidad de la vida cotidiana.
Pintora afirmada, ha expuesto en importantes exposiciones internacionales que han recibido numerosos premios y reconocimientos. Sus obras están presentes en colecciones de todo el mundo.
En el 2018 ha recibido a la Cámara de los Diputados un Premio a la carrera.

“Doreanfashion es la realización de un sueño: trasladar mis obras sobre preciosos tejidos para que puedan usarse. Como la vida, Venecia es única, fascinante, impredecible; nunca la puedes descubrir hasta el final. Pero se puede inmortalizarla en una pintura y revivir con la ligereza de una estola de seda o la elegancia de un vestido impalpable. En esos momentos paramos el tiempo y lo que nos mueve se convierte en nuestro «.